viernes, 21 de noviembre de 2014

SORPRENDENTE?

"Inseguridad. Lejos del relato, en el mundo real..."

Nota de opinión de la concejal Laura Ramos






A ningún argentino puede ya sorprenderle la inseguridad reinante. Es una clara consecuencia de los 90, que la década ganada no alcanzó siquiera a atemperar. La droga se lleva puestos a nuestros jóvenes debajo de nuestras narices, porque Viedma queda en la Argentina y la Argentina se ha convertido durante la década ganada, según palabras del Ministro Rossi en el cruce mantenido con Berni, hace meses atrás, en un país de alto consumo y producción. Escalofríos provoca leer el informe oficial de la página del Sedronar sobre los Centros de Procesamiento. Y muy suelto de cuerpo, Berni, dice que el problema es que "estamos infectados de delincuentes extranjeros"
En el Consejo de Seguridad Local, nuestras Juntas Vecinales cuentan que los 160 beneficiarios del programa Nestor Kirchner se amontonan en las esquinas dando cuenta del rotundo fracaso de estas cooperativas sin destino específico. Los ECOS, bien gracias... Todas experiencias que fracasan con consecuencias sumamente complicadas. Al "Viedma Te Quiere Bien", un programa municipal de contención, de excelencia, la Provincia le retiró el apoyo financiero ni bien asumido este gobierno.
Resultado, no hay un sólo programa de contención de jóvenes en conflicto con la ley en nuestra ciudad, no hay seguimiento en las escuelas de niños con problemas, no hay estadísticas de deserción escolar en nivel medio donde está el gran problema, seguimos sin espacios de tratamiento de adicciones. Inseguridad, violencia, falta de contención, abuso de sustancias, deserción escolar.
Entonces, claro, las miradas se vuelven hacia la derecha. Necesitamos cámaras de seguridad. Endurecer las penas, echarle la culpa a los menores y a los extranjeros. En este marco, que en Río Negro los presos entren y salgan cuando quieren de las cárceles o que las comisarías estén sin recursos, es un detalle. Estas últimas no cuentan con recursos humanos suficientes, cuando se tiene la suerte de contar con los móviles, no hay plata para el combustible, teléfonos, siempre y cuando no haya una gotera, como en la Comisaría de El Cóndor, que lo inutiliza. En este desmadre a qué vecino se le ocurre perder el tiempo radicando una denuncia que jamás va a llegar a un resultado? Y dale que va, como no hay denuncias, las estadísticas no suben... Todos felices, vivimos en el paraíso.
Mientras tanto, lejos del relato, en el mundo real, los ajustes de cuentas se cobran vidas, los robos se suceden en seguidillas imparables y los supermercados empiezan a pensar en medidas de seguridad para evitar saqueos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario