domingo, 10 de agosto de 2014

vivir para morir en manos de los delincuentes?


La crisis de la seguridad / Matar por matar

Padres víctimas de la violencia sin freno

Las historias de las familias castigadas las últimas semanas por la inseguridad en el conurbano bonaerense y en la ciudad de Buenos Aires; el drama y los sentimientos después de que los hechos dejan de estar en la opinión pública y en los medios
 se conocen, pero el dolor por la violencia delictiva irracional los une. Son padres víctimas de la inseguridad que nadie puede detener. Sus hijos murieron, o quedaron gravemente heridos, atacados por delincuentes dispuestos a todo para conseguir un magro botín. Matar por matar parece ser la consigna. Violencia irrefrenable por una bicicleta, un par de zapatillas, una moto o un celular.
El 17 de julio pasado, cerca de las 5.10, Mariano León, hincha fanático de River, se quemaba las pestañas con unos apuntes de la facultad. A las 9 debía rendir un parcial de Sociología del tercer año de la carrera de Contador Público, que cursaba en la Universidad de Buenos Aires (UBA). "Me despierto por los gritos de Mariano y veo que estaba forcejeando con un chico encapuchado que entró por la ventana, pero no vi que estaba armado", explica Edith, la madre del joven.
Sin dudarlo, la madre de Mariano fue a ayudarlo y juntos lograron, a los empujones, tirar al intruso por la ventana del departamento ubicado en el primer piso del edificio. "Fue todo tan rápido que en el instante que lo empujamos se disparó la pistola que tenía el asesino", se lamenta Edith.
A Pablo Tonello lo mataron el 30 del mes pasado en la avenida del Libertador y Lacroze, en Palermo, cuando un delincuente le quiso robar su bicicleta. Sus padres, Nora y Eduardo, afirmaron a LA NACION: "Para que la investigación no quede incompleta queremos ir más profundo y saber por qué ocurrió".
El padre del joven consideró que, de no cambiar la idiosincrasia de la sociedad, la que, por ejemplo, sigue comprando cosas robadas, con el paso del tiempo, "los hechos cada vez van a ser más violentos".
El mediodía del viernes de la semana pasada no fue un día más para Rubén Ferreyra. El instinto de padre puso en alerta a Rubén, que se asomó a la ventanilla de la puerta de su casa, en Campana.
"Sólo vi la moto. Ahí me desesperé y abrí. Leo estaba tirado en la vereda, ensangrentado. Le levanté la remera y tenía un orificio grande a la altura del hombro izquierdo. Apenas se quejaba", recordó el hombre a LA NACION. Es difícil que su hijo pueda volver a caminar, el proyectil que disparó el delincuente le dejó muy dañada la médula.
El lunes pasado, en Villa Bosch, fue asesinado Matías Gandolfo, de 19 años. Nos dicen que lo mataron porque se resistió, pero esa no es una condición para que asesinen a un chico. Él tenía razón, no hay que entregar lo que es de uno", sostuvo Karina, la madre de la víctima.
Los une el dolor y el reclamo de justicia....
http://www.lanacion.com.ar/1717324-padres-victimas-de-la-violencia-sin-freno

No hay comentarios:

Publicar un comentario