NOS LLEGA Y LO DIFUNDIMOS
“No le pedimos que nos den una mano ,le pedimos que nos saquen las manos de encima”
Jerónima
Caminar por donde sea te da miedo , nos generaron el miedo , como una vacuna contra la solidaridad nos inocularon el miedo al otro.
Como de repente , estaban en plazas , estaciones, pidiendo limosna, limpiando vidrios de autos, vendiendo baratijas, o robándole a los distraídos, robando como les roban sus infancias , sus inocencias , sus ganas de vivir y sus sueños.
Eran algunos pocos , al principio ya hace algunos años , de a poco se transformaron en imagen habitual, revolviendo las bolsas de basura , las sobras, lo tirado por el consumo ajeno, carros , changuitos , o a mano nomás cargaban los bultos que se iban conformando, solos o en grupos, en familia , sin diferencia de edad , a la noche se empezó hoy , a toda hora se ve a los sobrevivientes de los desechos , con dignidad arrastrando su cansancio de tanta injusticias , en el sur olvidado o el norte cheto y lejano, de esta ciudad ajena, ellos están.
Paisaje ciudadano , de plazas enrejadas, calles bombardeadas , un papel tirado revolotea a mi alrededor , entre otros muchos papeles , papelitos y papelones , suerte me digo , un gran danés hizo sus grandes necesidades en mi camino , cruzo mirando mis pies , un auto frena sobre la senda peatonal , me como una puteada a pesar que el semáforo me avala con su verde, me debe putear , por la frustración que le genera el colectivo amenazante que a bocinazos estridentes , hace sombra sobre su paragolpes , la ley del gallinero , darwinismo social puro.
En mi cabeza se me mezcla como cóctel berreta, lo que me da ganas de hacer , con lo que puedo, con lo que debo , con lo que me gustaría , con lo que tengo que...
Todo se vuelve confuso , como para explicarlo , entre los bocinazos , eso que llaman smog y el agua saborizada a cloro , como contar la rara mezcla de necesidades insatisfechas , olores desagradables, mas personas que casas , hacinamiento, los insaciables ruidos molestos, pobreza extrema , en la misma cuadra donde tomaron un hotel se inaugura un hostel para turistas, en las puertas de algún shoping se apiñan potenciales compradores con los que piden algún vuelto , una moneda para viajar, para la leche , para el pan o para la cerveza.
Cambalache dijo el poeta , rió revuelto de mierdas y negligencias , demasiado para ser una ciudad puerto , demasiado aire viciado para ser Buenos Aires , demasiadas carencias para ser la reina del Plata.
La Patria es la infancia
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